domingo, agosto 19, 2007

-Veo un mar de letras y pienso: "¿Qué puta estoy pensando?." Cierro los ojos y me vuelvo a dormir.

-Veo otra vez el mismo mar de letras y me doy cuenta de que sí, es un sueño del que no voy a despertar jamás. Taaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaan. Música fúnebre, aparecen dos ataúdes llenos de mosquitos y detrás de la madeja negra de sus alas y cuerpos asquerosos salgo yo, con una pijama de Superman y doscientos cuarenta y cuatro poderes especiales nuevos adquiridos. Cierro los ojos y me vuelvo a dormir.

-Veo el mismo mar de letras y por primera vez y me pongo a descifrar lo que dicen "EJHUNIK", "PORQWERA", "BUTYRFXO". ¿Qué puta estoy pensando?. Cierro los ojos y paf. Vuelvo a dormir.

Es que tuve un día muy cansado, estoy trabajando de desordenador de letras para una fábrica de sopas que vino a Transilvania, La Fasole, o Fábrica de Sopas de Letra. Sí, de esas que probaste en tu infancia y hacías nombres y toda esa cagada, que hacía que unas tu inocente pensamiento con el remordimiento de conciencia de tus viejos cuando se fueron a follar justo cuando le dijiste "papá" al jardinero. Así tus viejos se conectaban conmigo, decían . La última vez que me conecté a alguien fue cuando electrocuté a una tía por decirme que tenía cara de estofado. "Estófate éste", le dije, y le conecté el bypass a una turbina de una represa. Pum. Zzz.

El trabajo de desordenador no es tan malo, el problema es que lograr algo aleatorio a propósito es muy difícil. Es como decir, desde ahora en adelante, esta media hora, voy a ser lo más espontáneo del mundo. Te acercas a alguien en el metro y le dices "qué lindo día verdad?" y te responde el señor muy apurado "quieres mi plata choro hijo de puta?", y claro, comprendes porque la espontaneidad es muy cara y peligrosa. O como la vez que me acerqué a una multitud de fans de John Secada y les dije "Les gusta John Secada?". Fue la única vez que me he comido una lechuga entera desde como 15 metros de distancia. Bueno y otra vez que me comí veintisiete salchichas, pero era chico y no era justo porque mi primo el Jabalí-Orchata tenía 3 estómagos.

Creí que hoy me iban a pasar a supervisor de consonantes, pero el hijo de puta de Sigfried metió cinco vocales en mi puesto (todas iguales, arrrrrrgggggh!) y cuando presenté los finales el jefe me pinchó la retina izquierda con su tenedor. Ahora veo borroso, pero todo bien, me crece otra en 2 días. Ó 3. La otra vez pasé como 47 días sin retina, pero era de noche. Qué tiempos aquellos sin retina...

Suena el despertador. Lo lanzo por el balcón y le quiebro la cabeza a Memorándum, mi nuevo mayordomo. 7 puntos y medio más una puteada en polaco. Típico domingo y me cago de sueño. Vamos a ordenar letras ahora, porque los mosquitos que me mordieron anoche están todos muertos.


Wiz-.

No hay comentarios.: