lineas aereas de hoy

Yo lo noto porque viajo mucho. Ademas viajaba bastante cuando las aereolineas eran jóvenes. Recuerdo esos vuelos de Ecuador a Bolivia, con escala de seis horasen Lima, via Lufthansa. O cuando viajaba desde cualquier parte de latinoamerica a USA en Eastern. O Saeta, linea earea ecuatoriana que decía que todos sus asientos eran primera clase. Fácil de prometer a gente que nunca viajó en primera. Eran los mismos putos asientos que TAME, solo que el avion estaba más limpio. Y debo admitir que en esa época había pocas posibilidades que se estrellara. Eran los días pre Nuns-For-Rent. Eron los días en que las computadoras eran nuevas. Esos días ya pasaron. Yo viajo lo mismo (tal vez, incluso, viajo más que antes). Tanto viajo que me siento sumamente cómodo en los aereopuertos. Nunca me pierdo. Siempre sé donde están los teléfonos, las monjas de alquiler, los baños, donde conprar cocaina, donde me puedo conectar a Internet, en que librería venden pornografía de hamsters y/o abuelitas, donde están los policías y a quien van a confundir por terroristas y les van a revizar todos los agujeros de su cuerpo. Una vez conocí a un Jerosolimitano que se dejó la barba y viajaba con turbante con la esperanza que le hagan esas pesquicias. Pero esa es otra historia.

De lo que quiero hablar no es de aereopuertos, es de lineas aereas. Es decir, puede no leer toda la introducción a este blog. Ah, claro, seguro ya la leyó. Bwajajajajaja! Te hice perder el tiempo! Así, poco a poco, con actos leves, hago notar mi maldad! Las lineas aereas, especialmente una que no voy a mencionar por respeto, pero que uso mucho. Llamémosla American A. No eso es muy obvio. Mejor llamémosla A. Airlines. AA, para simplificar, ¿no? Bueno, ellos. COmo la uso bastante, noto una degeneración en su calidad de servicio. Y yo le hecho la culpa a las computadoras.

Primero compré un pasaje, y como no lo pude usar porque me pegué una farra como si fuera año nuevo del 2000, que me duró once días y terminé con tres hamsters muertos, dos novias (y creo que un novio) tres enfermedades venereas, y un déficit de 5643 dolares en mi cuenta bancaria. Cuando desperté (en un callejón, al lado de un basurero, con solo mis calsonsillos y dos botellas de Anisado Patito vacías), me preocupé de pedir que suspendan mi vuelo (salía esa misma noche) Me dijeron que me cambiaban la fecha, ¡pero tenían que multarme casi US$600! Después perdieron mi reserva. Nunca usé ese pasaje.

Lo siguiente que me pasó fué cuando tenía un pasaje abierto (daración un año) de Nueva York-Miami-Lima. Pero una novia en NYC me regaló un pasaje a Miami (bueno, ex novia, me regaló el pasaje para botarme, no me quería ni cerca en esa ciudad). Ya listo para irme, llamé para usar mi vuelo abierto de retorno a Lima (pero solo el tramo desde Miami). La cosa es que me dijeron que solo podía usarlo desde New York. Además me dijeron que el pasaje que me regalaron no podía cancelarlo, y que igual no podía viajar en ese vuelo porque estaba lleno. Ni siquiera fueron flexibles cuando les explique que el vuelo no estaba lleno, porque yo solo necesitaba un pasaje, y la nueva reserva que me querían hacer podían hacerla después de cancelar el asiento que ya tenía reservado. "We can´t work that in our computers" fue la respuesta que me dieron.

¿Qué pasó con los tiempos de escribir todo en papeles y de gente amigable dispuesta a ayudar a los clientes? Bueno, me cago en todos ellos. Creo que voy a explorar viajes en tren. Eran lindos en otros tiempos. Claro, que en esos tiempos no habían aviones